La industria azucarera actualmente cuenta con una plantilla laboral antigua. Los ingenios enfrentan el problema de renovar por lo menos el 40% de su fuerza laboral en los próximos 5 años. El sector necesita de una fuerza laboral con capacidad de responder a los cambios que marca la automatización, la diversificación de productos y las nuevas formas organizativas.
Por su parte el sector turístico de Bahía de Banderas enfrenta el desafío de profesionalizar el servicio, aumentar la calidad y productividad en las operaciones y mejorar las condiciones de trabajo, especialmente de los jóvenes que se incorporan al sector. La oferta académica orientada al sector se caracteriza por la falta de acoplamiento entre los aprendizajes en el ámbito escolar y las necesidades organizacionales.
Modelo de intervención:
El modelo parte del diálogo social entre empleadores, sindicatos e instancias educativas gubernamentales. La gestión del proyecto recae en primera instancia en las empresas, quienes definan las competencias necesarias; establecen los requerimientos con las instituciones educativas participantes; brindan la protección jurídica y económica a los aprendices; seleccionan el equipo experto de sus centros de trabajo para facilitar los aprendizajes.
La formación está orientada no solo al desarrollo de competencias técnicas pero también al desarrollo de competencias transversales, sustentadas en el Trabajo Decente. Estas consoliden en el aprendiz capacidades que coadyuvan a la sostenibilidad económica, social y ambiental, en un contexto de mercados globales.
La duración de la formación de aprendices en la industria azucarera se consideró en dos años; para el turismo en 1 año. Parte de un contrato de trabajo para el aprendiz durante este período, que cubre un salario base y la seguridad social. Se estima que en el primer ciclo de aplicación, participarán 140 aprendices en el sector azucarero y 200 en el sector turismo. La edad del aprendiz es de 18 años y mayor. Pueden participar trabajadores en activos en las empresas así como trabajadores de nuevo ingreso.
La formación de aprendices debe considerar los ciclos naturales de cada sector. Tanto en el azúcar como en turismo, la formación considera un aproximada de 70% de aprendizaje en los centros de trabajo y un 30% en la escuela. La división tiene como base las temporadas naturales de cada sector: para azúcar la temporada de zafra y la de mantenimiento; para turismo las temporadas de alta y de baja afluencia turística. En zafra y temporada alta el aprendiz está aprendiendo en el trabajo. En mantenimiento y temporada baja, aprenderá en la escuela.
Etapas
- Sensibilización a nivel sector (mayo-agosto 2014)
- Identificación de puestos (septiembre-diciembre 2014)
- Consolidación vínculos institucionales y articulación con prioridades de política nacional (enero 2015)
- Consolidación participación sector educativo a nivel local y elaboración del material (febrero – mayo 2015)
- Diseño y impartición de capacitación de tutores en las empresas y de docentes en las escuelas (marzo – agosto 2015)
- Selección e inducción de aprendices (julio – agosto 2015)
- Arranque de la formación dual (septiembre - 2015)